Las ciudades son lugares de trueque…no lo son sólo de mercancías, son también trueques de palabras, de deseos, de recuerdos. La ciudad utópica aunque no la descubramos no debemos dejar de buscarla…
Ítalo Calvino Las ciudades invisibles.
Toda ciudad es escenario donde transcurren miles de historias de hombres y mujeres, es la materia prima de nuestros sueños y pesadillas, el paisaje en el que gestamos sentimientos, relaciones e ideas. Somos la ciudad, cada uno de nosotros es una célula que integra este basto organismo. Pero no se puede responsabilizar al espacio la ciudad es la suma de todos nosotros, un cuerpo en constante movimiento.
La necesidad de fundar nuestra felicidad individual en la ciudad (Polis), nos ha obligado a construir metafóricos puentes, albergues, murallas, torres, eficientes desagües, toda una arquitectura vital, una ética y un sistema de leyes: derecho. Diseñamos un modo nuevo de ser hombre, una nueva Humanidad. La ciudad es un fenómeno vivo y permanente, se le aborda por ello desde la Historia, la Filosofía, la Geografía, la Psicología, el Arte, la Arquitectura, la Sociología, la Política, la Literatura, la Antropología y, por supuesto, el Derecho. Las ciudades han sido siempre el centro del crecimiento económico, progreso tecnológico y producción cultural. Pero su rápido crecimiento ha traído consigo cosas negativas: violencia urbana y pobreza, personas sin hogar, sobrepoblación y problemas de salud, contaminación y desperdicios.
Para el siglo XXI se estima que la mitad de la población mundial vivirá en las ciudades y cada día hay más ciudades, tendemos a pensar en ellas como gestoras de todo mal, una idea que proviende incluso de tiempos bíblicos, la creación de las mismas era atribuída a Caín, el hermano traicionero, quizás sea de ese estigma del que el ciudadano del futuro debe desprenderse. Según el pensamiento medieval, el hombre es un peregrino entre dos ciudades que aspira a llegar a la ciudad de los cielos, desde siempre la urbe se representa simbólicamente como la madre, el hogar por antonomacia, con el doble aspecto de protección y límite, símbolo amurallado que lo rescata de los peligros impredecibles de la naturaleza, tal vez sea por eso que la diosa griega de la tierra Rea, lleva en su cabeza una corona de muros como símbolo de la ciudad, una suerte de madre que cobija a los ciudadanos. Como toda madre, la ciudad puede educar y proteger o corromper y estropear, es provedora de virtudes o de todos los vicios, sus calles son refugio o perdición.
Pero la verdad que es que en común se vive mejor y más tiempo, se disfruta de seguridad, de mayor riqueza y libertad, la ciudad surge como un mecanismo de superviviencia, un esfuerzo de colaboración, diversidad y tolerancia. Es curioso notar que la contribución rural al progreso humano es menor a la evolución que hemos logrado al congregarnos en la ciudad, por ello las grandes urbes buscan formas de cohabitación que procuren lo mejor de la ciudad y el respeto y convivencia con la naturaleza. Las analogías entre el cuerpo humano y la ciudad se remontan a Platón, se instalaron en el lenguaje de los arquitectos y planificadores desde la época de Leonardo da Vinci y Vitruvio. Sabemos que el espacio nos determina y nosotros a él. Por eso es fácil comprender que la ciudad moderna se describe en capas como la epidermis, en un mismo espacio pueden estar referidos infinitos lugares al mismo tiempo. La urbe acaba exactamente ahí donde pierde su nombre, aunque este lugar sea sólo una idea, desde la antigüedad urbe y ciudad eran cosas distintas, la primera se refería al espacio físico y la segunda al conjunto de los ciudadanos. El Homo sapiens se ha convertido en Homo Urbanus, lamentablemente hoy desconfiamos más de nuestros congéneres y vecinos, cual si fueran csiempre motivo de sospecha, hemos perdido la armonía de la sana convivencia y el crecimiento desmedido de estas zonas ha depredado y contaminado al medio ambiente.
Hoy en día la preocupación por las áreas urbanas, le recuperación de áreas verdes, ideas como sostenibilidad, conectividad, implementación de tecnología para la eficiente habitabilidad de los ciudadanos dan origen a una profusión de proyectos y conceptos que tienden a hibridarse y que podríamos agrupar en un solo objetivo: Habitabilidad, un concepto moderno que hace referencia a la competencia de las instituciones gubernamentales p y la sociedad civil organizada de proveer un espacio que propicie una vida “feliz” “calidad de vida” para todos sus integrantes, buscando la forma de ahorrar y proteger los recursos naturales, En ese sentido han surgido conceptos como “Green Cities” “Child Friendly Cities” “Smart Cities” “Sustainable Cities” o incluso “Smart Green Cities”
Este objetivo se subordina a uno más complejo, el desarrollo de sociedades óptimas que incluyen habitabilida, habilidad y sustentabilidad
La pregunta es ¿Cómo debe ser la ciudad hoy? Si cruzamos los objetivos de los proyectos antes citados podemos arribar a conclusiones comunes:
1. La ciudad debe ser verde, recuperación de vialidades y regeneración urbana antes grises por una armónica combinación de vías de comunicación que se funden con parques y espacios de convivencia. Esto repercute en aspectos de seguridad pues el ciudadano que usualmente se alejaba de la agresiva mancha urbana es convidado a volver a transitar por zonas verdes donde además se llevan a cabo actividades culturales y recreativas.
2. Las distancias y el transporte deben acortarse, para ello los barrios deben proveer a los ciudadanos todas las posibilidades para no tener que desplazarse, mediante programas que procuren que los ciudadanos tengan escuelas y centros de trabajo cerca de su vivienda. De aquí se desprenden programas de transporte que usen la tecnología para aminorar la emisión de contaminantes, así como la eliminación del transporte individual. Hoy en día existen proyectos tan ambiciosos como el de montar la ciudad en plataformas giratorias que acerquen al peatón y eliminen la necesidad de conducir.
3. Edificios sostenibles e inteligentes, ahorradores de energía, diseños que se adapten a la nueva urbanidad verde
4. Conectividad Seaprovecha las oportunidades que ofrecen las TIC para aumentar la prosperidad local y la competitividad lo que implica un enfoque de desarrollo urbano integrado sobre la base de múltiples actores, multi-sectorial, y las perspectivas de varios niveles:
• Administración de la Ciudad, para agilizar la gestión y entregar nuevos servicios de manera eficiente.
• Educación, para aumentar el acceso, mejorar la calidad y reducir los costos.
• Salud, para aumentar la disponibilidad, proporcionar mayor rapidez en el diagnóstico preciso, ofrecer cuidados para la salud y de prevención.
• Seguridad pública, para utilizar información en tiempo real para anticipar y responder rápidamente a las emergencias y amenazas.
• Bienes raíces, para reducir los costos operativos, el uso más eficiente de energía, aumentar el valor y mejorar las tasas de ocupación.
• Transporte, para reducir la congestión del tráfico, fomentar del uso del transporte público, mejorando la experiencia del cliente con viajes más eficientes y seguros.
• Servicios públicos, para gestionar las interrupciones, los costos de control, de energía o agua y la reducción de residuos.
Otra pregunta sería ¿Cómo deben ser los habitantes de hoy? Un espacio de las condiciones citadas requiere de personas que actúen en consecuencia y que adopten una forma sostenible y ética de convivir con el espacio. Educar y convertirnos en ciudadanos competentes se traduce en reconocernos como agentes y operarios del cambio, establecer las competencias necesarias para la vida en común y mirar al futuro con esperanza, decisión y con proyectos que sean puntos que vinculen nuestro presente con el mañana. Ningún esfuerzo sería trascendente si no reconocernos que todo cuanto hacemos se orienta en la búsqueda de la felicidad que debe traducirse en calidad de vida digna para la comunidad que integramos.
El Banco Inter-Americano de desarrollo, BID sostuvo la primera evaluación comparativa de las competencias ciudadanas en seis países de América Latina. Dicha encuesta arrojó la necesidad de desarrollar competencias ciudadanas fundamentales desde las aulas:
vCapacidad para resolver conflictos de manera pacífica
vHabilidades de comunicación como alternativa a la agresión
vCapacidad de procesar ideas y escuchar a los demás con el fin de llegar a acuerdos
vPreocupación por el otro, personas, los seres vivos y el medio ambiente
vHabilidades emocionales para la convivencia (control de la ira, empatía, asertividad)
vParticipación en la toma de decisiones colectivas
vCapacidad de proponer ideas para el mejoramiento colectivo
vHabilidades de Liderazgo
vCapacidad de representar a los demás
vCapacidad para defender los intereses de otros
vCapacidad para hacer frente a la discriminación por medio de mecanismos democráticos
Todas ellas son esenciales para mejorar el rendimiento en casi todas las esferas de la vida, incluyendo el desempeño académico, la permanencia en la escuela, el desempeño laboral y la reducción de conductas de riesgo. Esto hace que las competencias ciudadanas sean clave para mejorar la calidad de la educación y la promoción de la convivencia pacífica, una vida más armónica y por ende feliz.
En 2006, el Banco Interamericano de Desarrollo, se unió a los organismos de Educación de Chile, Colombia, Guatemala, México, Paraguay y la República Dominicana para crear el Sistema Regional de Evaluación y Desarrollo de Competencias Ciudadanas , SREDECC que persigue fortalecer las políticas, programas y evaluación para el desarrollo de la ciudadanía en la región. La prueba utiliza una muestra representativa de cada país y se midieron Conocimientos, actitudes y habilidades en tres áreas:
(a) Convivencia y paz;
(b) Participación democrática
(c) Pluralidad y diversidad.
Como corolario a estas palabras admito que asistí con deleite al Primer Foro Global de Ciudadanía organizado por la institución para la que trabajo y más allá de emitir una opinión sobre la asesoría al gobierno federal por parte del ex director general de la Policía Nacional de Colombia, el General Óscar Naranjo, debo admitir que me impresionó la elocuencia de su discurso, insistió en posicionarse como un policía culto, nos convocó a imaginar un diálogo entre Pericles y Fernando Savater en dar importancia a la narrativa¿cúal es la historia que nos estamos contando sobre nuestro país y qué labor jugamos todos en su construcción? Demostró que puede citar a Carlos Fuentes, Octavio Paz, a los Mayas, a su paisano García Márquez. No olvido agradecer, citar oportunamente, no cayo en compromisos fáciles ni promesas ambiciosas, como buen narrador hizo alarde de una gran capacidad para elaborar metáforas posicionándose como la materia oscura cuya labor es hacer brillar a los otros, a los mexicanos, apostar al salario emocional, al talante femenino y a narrativas de confianza, habló y hablo, sin notas, sin apoyos visuales sin errores, olvidó un dato, lo que fue su único error que sirvió para resaltar lo impecabe de su discurso.
Contrario a este estilo entró Tonny Blair al ritmo de All you need is love, y nos habló de su “Face to Faith” una organización concebida para dirimir diferencias religiosas, para invitar a la tolerancia y entender la paradoja que hace de estos sistemas que deberían promover la compasión, organizaciones que promueven guerra e intolerancia. Su simplicidad y desparpajo conmovieron de otro modo distinto al de Naranjo admitió que cuando comenzó como Primer Ministro era más popular pero menos apto y cuando salió, era más apto pero inpopular. Estableció que en su opinión no hay peor injusticia que la mala o pobre educación.
La ciudad y sus ciudadanos son hoy temas de agenda, son escenario y protagonistas si pudiera resumir en una figura la solución que agrupa una ciudadanía sana sería, usurpando la trinidad religiosa el cumplimiento con la santisima trilogía ciudadana: cumplimiento político, empresarial y civil, todos somos grandes implicados.
Enviado desde mi Blackberry® 3G de Iusacell. -----Original Message----- From: Regina Freyman Date: Mon, 1 Oct 2012 22:16:48 To: Marco Levario Subject: Ciudad y ciudadanos Ciudad y ciudadanos Las ciudades son lugares de trueque…no lo son sólo de mercancías, son también trueques de palabras, de deseos, de recuerdos. La ciudad utópica aunque no la descubramos no debemos dejar de buscarla… Ítalo Calvino Las ciudades invisibles. Toda ciudad es escenario donde transcurren miles de historias de hombres y mujeres, es la materia prima de nuestros sueños y pesadillas, el paisaje en el que gestamos sentimientos, relaciones e ideas. Somos la ciudad, cada uno de nosotros es una célula que integra este basto organismo. Pero no se puede responsabilizar al espacio la ciudad es la suma de todos nosotros, un cuerpo en constante movimiento. La necesidad de fundar nuestra felicidad individual en la ciudad (Polis), nos ha obligado a construir metafóricos puentes, albergues, murallas, torres, eficientes desagües, toda una arquitectura vital, una ética y un sistema de leyes: derecho. Diseñamos un modo nuevo de ser hombre, una nueva Humanidad. La ciudad es un fenómeno vivo y permanente, se le aborda por ello desde la Historia, la Filosofía, la Geografía, la Psicología, el Arte, la Arquitectura, la Sociología, la Política, la Literatura, la Antropología y, por supuesto, el Derecho. Las ciudades han sido siempre el centro del crecimiento económico, progreso tecnológico y producción cultural. Pero su rápido crecimiento ha traído consigo cosas negativas: violencia urbana y pobreza, personas sin hogar, sobrepoblación y problemas de salud, contaminación y desperdicios. Para el siglo XXI se estima que la mitad de la población mundial vivirá en las ciudades y cada día hay más ciudades, tendemos a pensar en ellas como gestoras de todo mal, una idea que proviende incluso de tiempos bíblicos, la creación de las mismas era atribuída a Caín, el hermano traicionero, quizás sea de ese estigma del que el ciudadano del futuro debe desprenderse. Según el pensamiento medieval, el hombre es un peregrino entre dos ciudades que aspira a llegar a la ciudad de los cielos, desde siempre la urbe se representa simbólicamente como la madre, el hogar por antonomacia, con el doble aspecto de protección y límite, símbolo amurallado que lo rescata de los peligros impredecibles de la naturaleza, tal vez sea por eso que la diosa griega de la tierra Rea, lleva en su cabeza una corona de muros como símbolo de la ciudad, una suerte de madre que cobija a los ciudadanos. Como toda madre, la ciudad puede educar y proteger o corromper y estropear, es provedora de virtudes o de todos los vicios, sus calles son refugio o perdición. Pero la verdad que es que en común se vive mejor y más tiempo, se disfruta de seguridad, de mayor riqueza y libertad, la ciudad surge como un mecanismo de superviviencia, un esfuerzo de colaboración, diversidad y tolerancia. Es curioso notar que la contribución rural al progreso humano es menor a la evolución que hemos logrado al congregarnos en la ciudad, por ello las grandes urbes buscan formas de cohabitación que procuren lo mejor de la ciudad y el respeto y convivencia con la naturaleza. Las analogías entre el cuerpo humano y la ciudad se remontan a Platón, se instalaron en el lenguaje de los arquitectos y planificadores desde la época de Leonardo da Vinci y Vitruvio. Sabemos que el espacio nos determina y nosotros a él. Por eso es fácil comprender que la ciudad moderna se describe en capas como la epidermis, en un mismo espacio pueden estar referidos infinitos lugares al mismo tiempo. La urbe acaba exactamente ahí donde pierde su nombre, aunque este lugar sea sólo una idea, desde la antigüedad urbe y ciudad eran cosas distintas, la primera se refería al espacio físico y la segunda al conjunto de los ciudadanos. El Homo sapiens se ha convertido en Homo Urbanus, lamentablemente hoy desconfiamos más de nuestros congéneres y vecinos, cual si fueran csiempre motivo de sospecha, hemos perdido la armonía de la sana convivencia y el crecimiento desmedido de estas zonas ha depredado y contaminado al medio ambiente. Hoy en día la preocupación por las áreas urbanas, le recuperación de áreas verdes, ideas como sostenibilidad, conectividad, implementación de tecnología para la eficiente habitabilidad de los ciudadanos dan origen a una profusión de proyectos y conceptos que tienden a hibridarse y que podríamos agrupar en un solo objetivo: Habitabilidad, un concepto moderno que hace referencia a la competencia de las instituciones gubernamentales p y la sociedad civil organizada de proveer un espacio que propicie una vida “feliz” “calidad de vida” para todos sus integrantes, buscando la forma de ahorrar y proteger los recursos naturales, En ese sentido han surgido conceptos como “Green Cities” “Child Friendly Cities” “Smart Cities” “Sustainable Cities” o incluso “Smart Green Cities” Este objetivo se subordina a uno más complejo, el desarrollo de sociedades óptimas que incluyen habitabilida, habilidad y sustentabilidad Condiciones externas Percepción interna Oportunidades de vida Habitabilidad del entorno Adaptabilidad de la persona Resultados de vida Utilidad de la vida Disfrute de la vida La pregunta es ¿Cómo debe ser la ciudad hoy? Si cruzamos los objetivos de los proyectos antes citados podemos arribar a conclusiones comunes: 1. La ciudad debe ser verde, recuperación de vialidades y regeneración urbana antes grises por una armónica combinación de vías de comunicación que se funden con parques y espacios de convivencia. Esto repercute en aspectos de seguridad pues el ciudadano que usualmente se alejaba de la agresiva mancha urbana es convidado a volver a transitar por zonas verdes donde además se llevan a cabo actividades culturales y recreativas. 2. Las distancias y el transporte deben acortarse, para ello los barrios deben proveer a los ciudadanos todas las posibilidades para no tener que desplazarse, mediante programas que procuren que los ciudadanos tengan escuelas y centros de trabajo cerca de su vivienda. De aquí se desprenden programas de transporte que usen la tecnología para aminorar la emisión de contaminantes, así como la eliminación del transporte individual. Hoy en día existen proyectos tan ambiciosos como el de montar la ciudad en plataformas giratorias que acerquen al peatón y eliminen la necesidad de conducir. 3. Edificios sostenibles e inteligentes, ahorradores de energía, diseños que se adapten a la nueva urbanidad verde 4. Conectividad Se aprovecha las oportunidades que ofrecen las TIC para aumentar la prosperidad local y la competitividad lo que implica un enfoque de desarrollo urbano integrado sobre la base de múltiples actores, multi-sectorial, y las perspectivas de varios niveles: • Administración de la Ciudad, para agilizar la gestión y entregar nuevos servicios de manera eficiente. • Educación, para aumentar el acceso, mejorar la calidad y reducir los costos. • Salud, para aumentar la disponibilidad, proporcionar mayor rapidez en el diagnóstico preciso, ofrecer cuidados para la salud y de prevención. • Seguridad pública, para utilizar información en tiempo real para anticipar y responder rápidamente a las emergencias y amenazas. • Bienes raíces, para reducir los costos operativos, el uso más eficiente de energía, aumentar el valor y mejorar las tasas de ocupación. • Transporte, para reducir la congestión del tráfico, fomentar del uso del transporte público, mejorando la experiencia del cliente con viajes más eficientes y seguros. • Servicios públicos, para gestionar las interrupciones, los costos de control, de energía o agua y la reducción de residuos. Otra pregunta sería ¿Cómo deben ser los habitantes de hoy? Un espacio de las condiciones citadas requiere de personas que actúen en consecuencia y que adopten una forma sostenible y ética de convivir con el espacio. Educar y convertirnos en ciudadanos competentes se traduce en reconocernos como agentes y operarios del cambio, establecer las competencias necesarias para la vida en común y mirar al futuro con esperanza, decisión y con proyectos que sean puntos que vinculen nuestro presente con el mañana. Ningún esfuerzo sería trascendente si no reconocernos que todo cuanto hacemos se orienta en la búsqueda de la felicidad que debe traducirse en calidad de vida digna para la comunidad que integramos. El Banco Inter-Americano de desarrollo, BID sostuvo la primera evaluación comparativa de las competencias ciudadanas en seis países de América Latina. Dicha encuesta arrojó la necesidad de desarrollar competencias ciudadanas fundamentales desde las aulas: v Capacidad para resolver conflictos de manera pacífica v Habilidades de comunicación como alternativa a la agresión v Capacidad de procesar ideas y escuchar a los demás con el fin de llegar a acuerdos v Preocupación por el otro, personas, los seres vivos y el medio ambiente v Habilidades emocionales para la convivencia (control de la ira, empatía, asertividad) v Participación en la toma de decisiones colectivas v Capacidad de proponer ideas para el mejoramiento colectivo v Habilidades de Liderazgo v Capacidad de representar a los demás v Capacidad para defender los intereses de otros v Capacidad para hacer frente a la discriminación por medio de mecanismos democráticos Todas ellas son esenciales para mejorar el rendimiento en casi todas las esferas de la vida, incluyendo el desempeño académico, la permanencia en la escuela, el desempeño laboral y la reducción de conductas de riesgo. Esto hace que las competencias ciudadanas sean clave para mejorar la calidad de la educación y la promoción de la convivencia pacífica, una vida más armónica y por ende feliz. En 2006, el Banco Interamericano de Desarrollo, se unió a los organismos de Educación de Chile, Colombia, Guatemala, México, Paraguay y la República Dominicana para crear el Sistema Regional de Evaluación y Desarrollo de Competencias Ciudadanas , SREDECC que persigue fortalecer las políticas, programas y evaluación para el desarrollo de la ciudadanía en la región. La prueba utiliza una muestra representativa de cada país y se midieron Conocimientos, actitudes y habilidades en tres áreas: (a) Convivencia y paz; (b) Participación democrática (c) Pluralidad y diversidad. Habilidades Actitudes Acciones Personas que tienen sentidos de la confianza capaces de empatizar con los demás autonomía e iniciativa Capaces de entrar en relaciones de apoyo mutuo. Conscientes de que los conflictos violentos, los ataques de represalia, y similares, son formas inadecuadas de resolver los desacuerdos. Individuos con actitud de respeto a los derechos de los demás dispuestos a escuchar puntos de vista de los diversos. se acercan y se sirven de la naturaleza y sus recursos con un sentido de responsabilidad Presentan especial preocupación por los desfavorecidos, los excluidos, los marginados, las minorías, los niños. Tolerantes con la diversidad en todas sus formas (sociales, culturales, económicos, políticos, étnicos, religiosos, etc.) que valoran y respetan los derechos fundamentales del ser humano. Ciudadanos que aceptan la responsabilidad moral de sus decisiones y acciones. que son capaces de colaborar con otros, escuchar y dialogar con paciencia y flexibilidad, para la resolución de conflictos y diferencias Contribuir con planes y acciones necesarias para vivir en sociedad y hacer de su entorno y de su comunidad un mejor lugar para vivir. Capaces, de participar en ejercicios democráticos de colaboración para aliviar la pobreza, combatir la corrupción, garantizar la equidad en la distribución de recursos, etc. Como corolario a estas palabras admito que asistí con deleite al Primer Foro Global de Ciudadanía organizado por la institución para la que trabajo y más allá de emitir una opinión sobre la asesoría al gobierno federal por parte del ex director general de la Policía Nacional de Colombia, el General Óscar Naranjo, debo admitir que me impresionó la elocuencia de su discurso, insistió en posicionarse como un policía culto, nos convocó a imaginar un diálogo entre Pericles y Fernando Savater en dar importancia a la narrativa ¿cúal es la historia que nos estamos contando sobre nuestro país y qué labor jugamos todos en su construcción? Demostró que puede citar a Carlos Fuentes, Octavio Paz, a los Mayas, a su paisano García Márquez. No olvido agradecer, citar oportunamente, no cayo en compromisos fáciles ni promesas ambiciosas, como buen narrador hizo alarde de una gran capacidad para elaborar metáforas posicionándose como la materia oscura cuya labor es hacer brillar a los otros, a los mexicanos, apostar al salario emocional, al talante femenino y a narrativas de confianza, habló y hablo, sin notas, sin apoyos visuales sin errores, olvidó un dato, lo que fue su único error que sirvió para resaltar lo impecabe de su discurso. Contrario a este estilo entró Tonny Blair al ritmo de All you need is love, y nos habló de su “Face to Faith” una organización concebida para dirimir diferencias religiosas, para invitar a la tolerancia y entender la paradoja que hace de estos sistemas que deberían promover la compasión, organizaciones que promueven guerra e intolerancia. Su simplicidad y desparpajo conmovieron de otro modo distinto al de Naranjo admitió que cuando comenzó como Primer Ministro era más popular pero menos apto y cuando salió, era más apto pero inpopular. Estableció que en su opinión no hay peor injusticia que la mala o pobre educación. La ciudad y sus ciudadanos son hoy temas de agenda, son escenario y protagonistas si pudiera resumir en una figura la solución que agrupa una ciudadanía sana sería, usurpando la trinidad religiosa el cumplimiento con la santisima trilogía ciudadana: cumplimiento político, empresarial y civil, todos somos grandes implicados.